Es muy curioso como las imágenes que se convierten en iconos como la de 'Almuerzo en el rascacielos' pasan a ser criticadas por todos lados y a buscar justificaciones del tipo 'es una foto de estudio' o 'pidió a los obreros que posaran allí', etc... ¿yyyyyyy? No deja de ser una foto cojonuda.
Es muy curioso el caso de esta foto, ganadora del premio pulitzer...
Su autor, Kevin Carter, se suicidó y se corrió la voz de que no había podido soportar vivir con la culpa por dejar abandonada a la niña que acabó siendo comida por los buitres...
Sin embargo, Luis Davilla (fotógrafo español) sacó esta foto unos meses más tarde...
y explicó que los buitres no están esperando a que mueran los niños para comérselos (de hecho, la protagonista de la foto de Carter debía seguir viva hace unos años). Se trata de un vertedero a las afueras de un campamento de refugiados donde los refugiados van a cagar y a echar la mierda del campamento y allí esperan los buitres para aprovechar los desperdicios.
Pero como a todos nos gusta mucho la polémica...