GANÓ LA COPA AL BARCELONA CON UNA GRAN SEGUNDA MITAD
El Atlético vuelve a ser el Rey
Partidazo de Hombrados, que fue un muro en la segunda parte.
Los de Talant Duishebaev tardaron 35 minutos en ponerse por delante en el marcador.
Copa del Rey Final
Atlético 37
Barcelona 31
El Atlético de Madrid se convirtió en el campeón de la Copa del Rey de balonmano al vencer con claridad al Barcelona por 37-31. Un triunfo que se cimentó en una gran segunda mitad de los hombres de Talant Duishebaev y que le sirve para revalidar el título conquistado el año pasado, aún como Ciudad Real.
El conjunto rojiblanco tardó 35 minutos en adelantarse en el marcador, pero una vez que lo consiguió fue una apisonadora. Ni el campeón de Europa pudo frenar su avalancha de juego. Todo lo que tocaban iba dentro ante la desesperación azulgrana. Pero hasta llegar a ese momento, el partido era del Barcelona.
En la primera mitad se vio mucha igualdad, con rentas no superiores a los tres tantos a favor de los de Xavi Pascual. Fueron 30 minutos donde las defensas se impusieron. Nagy y Rutenka fueron los directores de orquesta, repartiendo y haciendo goles. Markussen y Lazarov mantenían vivo al Atlético hasta que tomó el relevo Cañellas.
Con 10-13 para el Barça, el internacional español sacó su brazo a relucir para igualar el partido a 14. Al final, un tanto de Raúl Entrerríos le dio ventaja al Barcelona al descanso, haciendo justicia a lo visto hasta el momento.
En la segunda mitad siguió la tónica durante los cinco primeros minutos: dominio azulgrana tanto en el marcador como en el electrónico. Ahí llegó la transformación rojiblanca. Primero comenzó a funcionar la defensa, sobre todo gracias a Hombrados, que se convirtió en un muro. Luego Markussen sacó su brazo y puso por delante a su equipo por primera vez. Parcial de 5-0 que evidenciaba el cambio y que obligó a Pascual a pedir un tiempo muerto.
El Barcelona se mantuvo cerca del Atlético en el marcador, a dos o tres goles. Pero dos tantos seguidos de Kallman pusieron el 25-21, algo que pese a faltar todavía 15 minutos, le dejó tocado. Fue el momento en el que el partido se volvió loco, con un intercambio de golpes que siempre ganaba el Atlético, principalmente por el estado de gracia de Hombrados.
Los de Duishebaev entraron en los últimos 10 minutos con una renta de siete tantos, algo que parecía insalvable. Una pequeña relajación invitó al tímido despertar del Barça, pero al final no cambió la película. El Atlético ganaba otra vez la Copa del Rey tras 26 años de espera. El mismo grupo que triunfó el año pasado con el Ciudad Real, levantó nuevamente la copa.