Siento auténtico ASCO después de ver a jugada que da origen al 2-1 del Madrid. Pero ASCO de verdad. ¿Cómo se puede ser tan desgraciado de sacar una falta rápidamente con el portero en el suelo para que no se le pueda atender? Y, aun más grave, ¿cómo se puede dejar seguir el juego? ¿En qué estaba pensando el árbitro? Eso es para mandarlo a la nevera de por vida y que no vuelva a arbitrar jamás. Si yo hubiese sido Caballero, me hubiera quedado en el suelo, y que hubiesen marcado, si así querían. Por un lado, si don Santiago Bernabéu levantase la cabeza... Y por otro lado, a ver qué tiene que decir el señor Arminio (o quien corresponda) al respecto de la jugada. Tema aparte ya es la cesión.